Todos sabemos que las comparaciones son odiosas, y estamos de acuerdo. Pero por eso somos una panda de seres odiosos y con más mala leche que una milka a quien se le ha pasado el arroz. Como comprenderéis, nos da igual.
Hoy tenemos uno de esos combates que quitan el hipo. Túneles contra texto. Graficos bonitos con... bueno, niñas bonitas. Banda sonora de millones de dólares contra sintetizador musical de cocina. ¿Estáis preparados? Agarraos los tirantes porque ahí va.
Gráficos
Bueno, aquí no hay mucho donde rascar. Así cuando uno tiene unos gráficos 3D espectaculares el pobre True Love tiene imagenes 2D del año en que Julio César se hizo sargento del ejército romano. Resultonas, eso sí, pero no pueden contra el poder de unos 3D bien hechos.
Adjunto unas imagenes para que os hagáis una idea.
Final Fantasy XIII: 1 punto
True Love: 0 puntos
Banda Sonora
Bueno, aquí también gana la partida el final fantasy XIII. Sin ser la mejor banda sonora echa nunca, cuenta con bastante más presupuesto que el pobrecito True Love. No hay mucho más que decir.
Final Fantasy XIII: 2 puntos
True Love: 0 puntos
Jugabilidad
Final fantasy XIII empieza a cojear. Un montón de datos visuales por pantalla, una velocidad de acción de vértigo PERO solo puedes controlar un personaje a la vez. El resto de personajes van a su bola según el rol que les hayas asignado. Eso significa que el juego se acaba convirtiendo en cambiar roles en medio del combate según necesidad y aporrear el botón de "acción automática" para ir más rápido. Luego, no hay mucha variedad, es avanzar pasillos y la única libertad real existente es cuando paseas por la estepa del crapness cumpliendo misiones de Cie'th a diestro y siniestro (que lo único que significa es: mata a este bicho malote y feo que me ha reventado el ojal).
Por contra, el True love, es un juego Hentai. Solo lees texto y decides que hacer en cada momento del día. Exacto, TOTAL libertad para llevar tu vida de estudiante como quieras e intentar camelarte a un target concreto de féminas.
Punto para True Love.
Final Fantasy XIII: 2 puntos
True Love: 1 puntos
Desarrollo de personajes.
Final fantasy XIII: Desa... ¿que? Perdona, no te entiendo.
Todo el desarrollo que tiene de personajes Final Fantasy XIII está predeterminado por una especie de tablero de esferas, en el cual puedes "en teoría" seleccionar el camino, pero en realidad sólo hay uno. Hay esferas que se salen del camino principal pero que se cortan enseguida. Con un poco de farmeo, lo consigues todo en un plis. Las armas definitivas, es de risa. Consiste en conseguir dinero. Punto. Con dinero, se compra todo. A parte, el juego no es nada rejugable, no hay ningún tipo de motivación para ello.
True Love: Depende de tus acciones diarias. Correcto. Libertad absoluta. ¿Quieres ser un empollón? Dedica el tiempo a tu estudio. ¿Quieres convertirte en un deportista que moja las bragas de las colegialas? Dedícate a quitarte los michelines y a poner en forma esas lorzas. A parte que esto permite que el juego sea rejugable 100% ya que según tus acciones, puedes ir a por unas tías u otras, o incluso intentar el reto de conseguir cuantas más en una sola partida mejor.
Punto para True Love.
Final Fantasy XIII: 2 puntos
True Love: 2 puntos
Historia
Final fantasy XIII: Más que historia, debería denominarse histeria. (Sí, me ha costado horrores sacar el juego de palabras y estoy orgulloso, ¿que pasa?). Una historia de trasfondo que promete mucha más de lo que se nos ofrece. Sin rumbo fijo, la historia deambula por un mar de situaciones inconexas camufladas con escenas de vídeo espectaculares. Indigno de un FF.
True Love: Cumple. Es un juego hentai, no esperéis giros de trama espectaculares aparte de situaciones comprometidas y subidas de tono. Pero cumple. Sabes en todo momento hacia donde se dirige, y hay tantas historias como mujeres que ligarte. Sin paranoias, ni colorantes ni conservantes.
Punto para True Love.
Final Fantasy XIII: 2 puntos
True Love: 3 puntos
Bueno, hasta aquí hemos llegado. Vamos a hacer el recuento final:
Superados por las inexpugnables fuerzas de los Mundos Síndicos, la flota de la Alianza prosigue su peligrosa retirada. Liderada por el legendario capitán John Black Jack Geary, la Alianza trata desesperadamente de volver a casa con su más preciada captura: la llave de la hipernet síndica, la llave de la victoria...
Geary está convencido de que los síndicos están planeando una emboscada contra la flota. Al caer en la cuenta de que la mejor (y única) opción de la Alianza consiste en hacer algo inesperado, Geary emprende una ofensiva y envía a la flota al sistema Sancere. Pero, hastiados por la interminable contienda, los oficiales y la tripulación de la flota de la Alianza provocan un motín que los divide, dejando a Geary con más desventaja que nunca...
Opinión
Este libro es la continuación de Intrépido que es donde nos empiezan a presentar los personajes que van a tener importancia durante la saga de la Flota Perdida, pero si nos fijamos más o menos sigue la misma tónica en este segundo libro:
- Presentación de nuevos personajes
- Alguna pequeña batallita al principio
- Batalla final y conclusiones para seguir al siguiente libro.
Puede parecer que lo reduzco demasiado, pero la esencia del libro queda un poco desdibujada por tramas secundarias que se inventa para rellenar el libro...
En general el libro me gusta como un libro más aunque en este tipo de géneros todavía estoy algo verde, creo que si se hubiera centrado más en seguir adelante y menos en desviarse con cosas secundarias habría mejorado bastante...
Cabe decir que esto lo digo en base a que el primer libro me parece más redondo, mejor vamos...
Resumen
Si te gusta el Space Opera, esta saga tiene muy buena pinta!
Phantomas, conocido ladrón, tiene como objetivo los tesoros de la mansión del hombre más rico del mundo... pero lo que no se espera encontrar es todo lleno de bichos con formas imposibles que tratarán de succionarle la vida antes de lograr su cometido.
Análisis
Lo reconozco. He perdido la poca cordura que me quedaba. Se que ha habido veces que he hecho retro-analisis pero esta vez he tirado demasiado de la máquina del tiempo y a poco termino con los fragasaurios en tiempos intempestivos. Pero creo que hay juegos que merecen sus homenajes. Y este es uno de ellos.
Allá por el 1986, apareció por primera vez este plataformas. Seamos sinceros. En aquella epoca era el estilo más común de videojuego. Las plataformas. Dados los recursos técnicos disponibles era muy dificil realizar otro tipo de genéro y que el resultado fuera aceptable, a parte de las aventuras conversacionales como Jabato o La Aventura Original.
Phantomas es un juego de plataformas simples. El objetivo, pulsar todas las palancas distribuidas por todas las pantallas para poder abrir la caja fuerte y robar el tesoro. Punto. Ni giros de trama (¡Ja! Si no tiene ni dialogos.) ni complicados controles. Solo salto alto, salto largo y moverse lateralmente. Podías recuperar vida que te quitaban los enemigos con dados (Si, dados, no preguntéis como un dado puede devolverte vida si no es con una tirada de Sanar). Los enemigos no te aturdían: mientras te tocaban te iban restando vida (almenos el suicidio era rápido).
Los graficos para ser un spectrum estaban a la altura. Colores simplones (superpuestos cuando dos sprites se encontraban, limitaciones técnicas de la máquina) y animación más aún. Pero resultona, oigan.
Os dejo con el mapa del juego y un video, pues no he sido capaz de encontrar capturas de la primera parte (solo había de la segunda... y ya perdía parte de la gracia).
Estoy preparado para recibir los comentarios asesinos y las facturas por los daños oculares que haya podido causar.
Sí, lo reconozco. El que hizo el video és patético jugando XD
La purga ha comenzado. Toda la gente seleccionada para la purga se está acercando como corderos al matadero a los trenes que les llevarán a su destino: Paals. La tierra debajo del pequeño asteroide flotante conocido como "El Nido", creado por los seres que lo sustentan, los Fal'Cie, para proteger a los humanos de los demonios que habitan allí. La purga es necesaria, pues un Fal'Cie de Paals se encontró cerca de un pequeño poblado, y hay que evitar la posibilidad de cualquier tipo de contaminación.
La gente, temerosa de su destino, no se atreve a levantar la mano contra el Sanctum, la organización que controla la ley en El Nido, por temor a peor trato. Solo un pequeño grupo de personas, por separado y sin darse cuenta, quieren abordar/parar esos trenes, con su propio objetivo en mente.
Análisis
Después de años de sequía y de videos mostrando la poténcia gráfica del Final Fantasy XIII, por fin este juego llegó a las estanterías de todo el mundo, esperando ser catado por el exigente público. Y remarco lo de exigente, no como algo maligno, sino como algo producto de la misma fama que precede a la saga.
Seamos sinceros, Final Fantasy ha sido una saga que todo el mundo ha catado o terminado alguno de los capítulos que la componen. Creada por Hironobu Sakaguchi, acompañado siempre por Yoshitaka Amano (Ilustración) y Nobuo Uematsu (Banda Sonora), esta saga brindó mundos fantásticos e historias épicas a nuestros pequeños aparatos de entretenimiento. Poco a poco fué una especie de agujero negro que absorvió a su propio creador, haciendole caer de la gracia de los directivos de su propia compañía. Ahora ésta vaga sin rumbo fijo por un mundo cada més más costoso y más exigente.
Y en todo este panorama, llega Final Fantasy XIII. Cuando pones el juego, y disfrutas del primer video, simplemente alucinas. Gracias a esto, entraré en el tema del apartado gráfico. No puedo decir otra palabra que INMENSO. Es un trabajo muy detallado, muy logrado, En cada una de las texturas y formas se nota el mimo y cuidado que le han dado. En este apartado, no dudo en darle un 10 como una catedral.
Luego llega la parte que todo amante del RPG desea ver. Jugabilidad. Bien, ahí es donde nuestro hype se desinfla como un globo. Un sistema en el que solo controlas a uno de los tres personajes que hay en batalla, mientras los otros dos los controla la CPU. Con esto han incluído un sistema de jobs, en cual lo importante son las formaciones que fuedas llegar a hacer con todos ellos. Por ejemplo, una formación ofensiva sería Ataque imparable, formado por un castigador (guerrero) y dos fulminadores (magos).
Son seis las profesiones existentes: Castigador, fulminador, obstructor (estados alterados al enemigo), sanador, inspirador (estados alterados para el grupo) y protector (protege al resto del grupo atrayendo los ataques). Las combinaciones son bastante extensas y dotan al combate de un poco de dinamismo, pero que dado el alto ritmo que tiene (los personajes se siguen pegando mientras tu piensas que hacer) provoca que acabes optando por hacer siempre la opción automatica: La CPU decide por tí cual es la mejor combinacion de ataques succesivos y los ejecuta. Todo esto es debido a que los Putnos de Magia desaparecen, dejando paso a la barra BTC. Las magias o habilidades, consumen parte de la barra BTC, que se llena durante el transcurso de la batlla y se pueden asignarle acciones. Cuando la barra se llena, se ejecutan acciones. Puedes forzar a ejecutar menos acciones dándole al botón Triangulo/Y.
Todo esto, pese a que a veces te toca estrujarte el cerebro previamente del combate pensando en la formación que usarás (ésta se puede cambiar en medio del combate de las 6 formaciones predefinidas que has generado) se acaba convirtiendo en un RPG aporreabotones. La unica vez que haces algo diferente es cuando cambias de rol, llegando a hacer los combates algo pesados en algunos momentos. A parte que en muchos casos, requieres de aturdir al enemigo (llenando su barra de aturdimiento a base de leches) para hacerle daño de verdad, desgraciadamente en la mayoría de los casos, haciendo los combates más largos.
El sistema de mejora de los roles no es mucho mejor. Para cada rol, existe su cristanium, que son una serie de bolas interconectadas con unos costes, valorados en PC y que se reciben al final de las batallas. Todo el mundo que ha jugado a FFX recordará el bonito tablero de esferas... Bien, nada parecido. Solo hay un único camino, y las desviaciones siempre terminan pronto, sin más. Con lo cual, el avance de los personajes está también predefinido.
La mejora de las armas, pues deja de desear. Así como en otros juegos, puedes dotar a las armas de efectos elementales, o de magias como Bio, aquí es gastando elementos y haciendole ganar EXP a la arma, provocando el mismo efecto que en los roles, mejoras predefinidas y poca especialización personal.
Casi me olvido de las invocaciones, pero no por negligencia, sino por que casi ni se usan. Las utilizas cuando estás jodido y necesitas curación, ya que cuando se van, te curan. La verdad es que hacía tiempo que no veía unas invocaciones tan inútiles.
Personalmente, no veo mal el sistema de lucha, pero lo encuentro flojo para el título del que estamos hablando.
Por otro lado, tenemos la historia. La historia de trasfondo es bastante buena. Toda la mitología con los Fal'Cie, Lu'Cie (humanos tocados por los Fal'Cie a los que les otorgan poderes a cambio de realizar una misión), Ciet'h (humanos que no son capaces de cumplir su misión y se convierten en monstruos) y cristales (humanos que consigue completar su misión) hace de este trasfondo algo muy atrayente. Luego, la historia principal no está mal, pero hay personajes a los que abofetearías hasta que te doliera la mano. Sobretodo a...
pero bueno, no se puede tener todo en esta vida.
Bueno, y viendo solo esto me queda por valorar la banda sonora, a la que veo a una buena altura, pero reaprovecha mucho la misma melodía; realzando la sensación todo el rato de unidad del mundo creado pero pudiendo llegar a cansar. Tiene grandes melodías como "Fighting Destiny", haciendo que su escucha valga la pena y realmente ayuda a la ambientación.
En resumen, Final Fantasy XIII, es un buen juego pero que lleva una carga pesada y es ser la treceava entrega de esta saga que ha maravillado durante muchos años a mucha gente, hasta incluso en algunos casos siendo exagerado.
